Tomo I Monterrey
Febrero 15 de 1888. Número 10.
Quincenal de literatura, social moral y de variedades
Dedicado a las familias.
Sueltos
Dos Nuevos Colegas.
Por falta de espacio en nuestras columnas no habíamos podido ocuparnos de dos simpáticos cologas que han visitado nuestra mesa de redacción y de los que no podíamos guardar más silencio sin acusarnos de esa galantería.
El uno nos viene de Oaxaca y lleva por título “La Voz de la Mujer” y está redactado por las Sritas. Rafaela S. Sumano y Leonor Zanabria. Se han consagrado á la instrucción de la mujer en la clase proletaria.
El segundo ee de Monterey, y lleva por título “La Violeta,” está dedicado á las familias y cuenta con un selecto cuerpa de colaboradoras, siendo directora de esto publicacion la Srita. Ercilia García y Sria. la Srita. Maria Garza Gonzalez.
Nosotros que hemos defendido siempre la causa de la ilustración de la mujer, no sólo nos concretaremos á felicitar á las directoras y cuerpo de redacción de los colegas citados, sino que hacemos extensivas nuestras felicitaciones á la sociedad donde tales publicaciones han aparecido, porque son una manifestaión clara del grado de cultura que han alcanzado.
Que la mujer se ilustre para que pueda cooperar con el hombre en la grande obra del perfeccionamiento humano; que su virtud sea ilustrada para que sepa amar el bien mismo, es nuestro bello ideal en la educación del bello sexo. Nuestro corazón palpita de entusiasmo al ver que la mujer misma enarbola el estandarte de su redención, rompiendo con vigor las cadenas de la preocupación y de la ignorancia.
¡Bien, estimables directoras de La Voz de la Mujer y La Violeta, que vuestro ejemplo tenga muchas imitadoras! ―[El Instructor, Aguascalientes]
“VIOLETAS DEL ANAHUAC.
Este nombre lleva ahora el ameno é ilustrado semanario “Las Hijas del Anahuac” que no ha mucho se fundó en la capital bajo la dirección de la entendida Sra. Laureana Wright de Kleinhans. Esta sustitución de nombre es motivada por la aparición en aquella ciudad de otro periódico que con el mismo nomcre de “Las Hijas del Anahuac,” está redactando la Sra. Concepción García de Mota Velasco.
El estimable colega de la Sra, Wright de K., hizo bien en cambiar de nombre par evitar así confusiones, que pudieran ser perjudiciales á los intereces de ambas publicaciones.
NOTICIAS ARTISTICAS,
Corría muy valido el rumor, y aún El Chisme, periódico que después de una larga suspensión ha vuelto á ver la luz pública, consigna la noticia de que un grupo de distinguidos jóvenes de ambos sexos, estaba estudiando para ponerla en escena próximamente, la preciosa zarzuela titulada El Juramento; pero según parece debido á circunstancias ajenas de la voluntad, no se realizará tan hermoso pensaminto, y es de sentirse verdaderamente.
Sin embargo, hemos sabido de positivo, por persona que nos merece entero crédito, que el infatigable y entusiasta Sr. Francesconi, prepara entre sus numerosas y aventajadas dicipulcs y varios elegantes jóvenes, la hermosísima opera Un Ballo in Maschera para ponerla en escena después de la pascua, ó en su defecto un gran concierto como los que sólo él sabe organizar y llevar á feliz realización.
Nosotras que, como todo Monterey, conocemos el espíritu resuelto y progresista del Sr- Francesconi, no dudamos ni por unm omento. de la veracidad de esta noticia, al contrario le damos todo caédito, esperando su realización para honra de la sociedad regiomontana y mayor gloria del Maestro.
¡Adelante Sr. Francenconi!
ORNATO PUBLICO.
Grandes son las mejoras de ornato y embellecimiento que se esátn llevando actualmeute á cabo en las plazas de Hidalgo, Bolívar, Lallave y Cinco de Mayo, las cuales quedarán en breve convertidas en hermosos y elegantes jardines públicos. También en la Alameda nueva siguen los trabajos con actividad y pronto tendremos un paseo más, digno de nuestra capital.
Monterey va mere ciendo dignamente el nombre de Sultana del Norte que se le ha dado.
FUNCION DE ZARZUELA.
El domingo anterior, se pusieron en escena en el Teatro del Progreso por algunos jóvenes aficionados, las bonitas zarzuelas denominadas La Gallina Ciega y Para una Modista un Sastre, destinándose la mitad de sus productos á las mejoras de la plaza de Lallave.
La concurrencia fué muy numerosa, y los jóvenes aficionados, sin escepción, hicieron gala de sus dotes artisticas, colocandose á la altura de sus respectivos papeles, y haciendo por ello merecedores de los prolongados y atronadores aplausos que sin cesar se les prodigaron durante toda la representación.
Ojalá y se repitan muy seguido espectaculos de esta uaturaleza.
A NUESTROS AGENTES Y SUSCRITORES FORANEOS.
Hacemos saber á todos aquellos de nuestros agentes y suscritores foraneos, que aun no hayan satisfecho sus pagos ni contestado sipiera la circular de fecha 1°. de Noviembre último, que si no arreglan sus cuentas con la administaación de La Violeta para el 15 del entrante Marzo, fecha en que fenece el semestre actual, se suspenderá el envío del periódico, hasta que no cubran el adeudo respectivo.
Ya lo saben.
Tomo I Monterrey
Febrero 15 de 1888. Número 10.
Quincenal de literatura, social moral y de variedades
Dedicado a las familias.
Opinión de la prensa
“La Violeta”
Así se titula un periódico quincenal escrito por señoritas que vé la luz pública en Monterrey, Nuevo León, y del cual hemos recibido dos números.
Amantes como somos de la ilustración del bellos sexo, felicitamos cordialmente á las redactores del periódico referido, con el cual establecemos el cambio de constumbre.―[El Espejismo, Guadalajara.]
“La Violeta.”
Hemos recibido los núms. 5, 6 y 7 de este interesante periódico que dedicado á las familias, publican en Monterrey, varias Señoritas y Señoras. Mucho agradeceremos á la Srita. directora, tenga la amabilidad de remitirnos los cuatro primeros números á fin de que nos quede completa la colección.―[La Voz de la Justica, Aguascalientes.]
Si la mujer es sublime, se hace mucho más interesante, cuando los frutos de su inteligeucia se lanzan al campo de la ilustración y el progreso. Sobre nuestra mesa de redaccion tenemos un precioso periódico dedicado á las familias y que está redactado por un bouquet de damas cuyos nombres nos honrmos en consignar. Directora, Ercilia García. Sria. Maria Garza Gonzalez: colaboradoras Sras. Julia G. de la Peña de Ballesteros, J. A. de Treviño, y Sritas. Edmonia B. Perez, Maria M. Browne. Elisa, Catalina, Aurora, Zenaida, Delia.
La Violeta es el poetico nombre de ese periódico que se publica en Monterrey, Nuevo León, y que en todos sus escritos sólo brotan perfumes.
Un sincero saludo enviamos á tan simpático periódico y una cordial felicitación á su ilustrada redacción.
Gustosos establecemos nuestro cange y con ansia savoreamos las bellas producciones de la Violeta, á quien le deseamos muy larga vida.―[El Cronista Musical, Ciudad de México.]
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Febrero 15 de 1888. Número 10.
Quincenal de literatura, social moral y de variedades
Dedicado a las familias.
María o la virgen del cántaro
(NOTABLE TRADICION.)
I. Gil Marconell
(Continua.)
Con gran sorpresa de los ocultos y á riesgo de haber sido descubiertos por el loco en la involuntaria esclamación que los tres hicieron, se presentó á sus ojos la estátua misteriosa que no habían visto hasta entonces. Aquella obra era un prodijio de gracia, de sentimiento y de poesía……
Representaba la estátua una niña joven semejante en un todo á la bella María. El artista había copiado sus primorosas facciones; sus largas trenzas, sus lindas manos, sus diminutos pies, su gracioso talle, había trazado todos los minuciosos pormenores de su gracioso traje, y sobre su cabeza habia colocado el cántaro que llevaba la tarde de su primera entrevista.
El conde y María estaban como petridicados en su escondite, y fué menester que el médico los sacara de su estupor para que, aprovechando un momento en que el loco parecía más entretenido, salieran de allí sin ser notados por él.
Señor conde, dijo el médico, la escena de que hemos sido testigos, me ha sugerido un medio de salvación para vuestro hijo; espero confiadamente que nos ha de producir mejor resultado que todos cuantos hemos empleado hasta hoy: Venid, venid, y tú también, Maria, pues sólo de tí depende el buen éxito de mi plan.
Al día siguiente penetró sola María en el taller de Manuel, ocultó la estátua, en un rincón y colocándose ella sobre el pedestal, procuró reproducir la actitud, el gesto, las miradas y todas las apariencias de aquélla.
Muy luego entró Manuel y aproximándose á la que creía su obra, para animarla con el soplo de su amor, cogió un cincel para corregir un defecto, una mancha que á su parecer había en la estátua, y que no era otra cosa sino un lunar que María tenía en su niveo pecho; levantó la mano para herir con la herramienta el transpatente cutis de María; hirió, y una mancha de sangre apareció inmediatamente á los ojos del artista.
¡Oh!……¡Que dicha exclamó Manuel arrojando la herramienta;! tiene ya vida!……¡está ya concluida¡……
La estátua decendió de pedestal, y fijos los ejos en Manuel, le miraba y sonreía.
―!Dios mío….. ¡Dios mío! murmuró temblando Manuel.
La estátua le llamó por su nombre y le tendió una de sus manos, y no pudiendo Manuel resistir la fuerza de tanta emoción, cayó sobre el suelo bañado en sudor.
Su padre y el médico se presipitaron entonces en el taller; levantaron á Manuel y le colocaron cuidadosamente en la cama.
Hubo un momento en que se creyó que Manuel había dejado de existir; pero aquel mismo día, pasaba la crisis, reconoció á su padre y á María,, estrechándolos repetidas veces sobre su corazón.
María murió algunos años después, y Manuel se encerró en el monasterio de Yuste á llorar la pérdida de su esposa.
Colocada la estátua en una capilla del convento, bajo la advacación de la virgen del cántaro, fué objeto, por espacio de muchos años, del culto y veneración de aquella comarca; y en la lucha que nuestro país sostuvo para conservar su independencia, despareció, como otras muchas preciosidades artísticas, de que sólo nos han quedado gloriosos recuerdos.
Tomo I Monterrey
Febrero 15 de 1888. Número 10.
Quincenal de literatura, social moral y de variedades
Dedicado a las familias.
Las amigas
María Garza González
(Continua.)
Primera Carta de Enriqueta.
Lináres, Setiembre de 1882
Querida María:―En pocas palabras voy á describirte mi viaje de esa ciudad á esta.
Como tú sabes, partí de mi querida Monterrey á las nueve de la mañana, con el alma llena de amargura, porque allí dejaba los seres más queridos de mi corazón, mispadres y hermanos; mas las molestias del camino me hicieron en breve olvidar las penas. No ignoras lo escabroso del terreno de esa ciudad á la de Cadereita, y más aún en tiempo de lluvias, como fué el que tuvimos al emprender nuestra marcha, haciendo por esto cuatro horas para llegar á ese tu pueblo natal, que en obsequio de la verdad, me sipatizó muchísimo. pues es muy pintoresco y bien delineado, aunque sus moradores son tan pacíficos ó poco amantes de bullicio, que me parecieron las calles poco menos que desiertas.
Nos hospedamos en casa de un Sr. Sada, amigo de mi esposo; y ahí tuve oportunidad de conocer á varias de las principales familias y disfrutar de su trato fino y distinguido; la esposa del señor Sada es un modelo de bondad; quiso obsequiarnos como en efecto nos obsequió con una bonita tertulia de familia, por lo cual tuvimos que permanecer allí hasta la mañana sigulente, en que emprendimos de nuevo nuestra marcha. Ya de allí fué una cadena no interrumpida de sustos y mortificaciones hasta llegar á esta población.
Figúrate cuánto nos sería mi temor con unos rios tan horrorosos como son: el de San Juan, Montemorelos y la Parida, á cual más de caudalosos y terribles; al cruzarlos sufrí mucho, pues me parecía que el coche se volcaba; y luego los arroyos y la infinidad de piedras que cubre la carretera…..¡ay! te aseguro que aun tengo el cuerpo triturado y con deseos de no hacer otro viaje jamás.
De Montemorelos no te daré razón por que llegué como debes comprenderlo, sumamente indispuesta; varias personas atentas y cumplidas se dignaron visitarme; pero era tal mi trastorno que casi ni supe quienes fueron; comprendí que á mi esposo lo aprecian bién y que á amí procuraban cumplimentarme; yo sentí por lo tanto, no poder corresponder á tanta fineza por el estado en que me hallaba, pues á veces hasta las atenciones de mi esposo me eran molestas. Por fin llegué al término del viaje, es decir á esta ciudad, y por mucho tiempo resentí las consecuencias producidas por las fatigas del camino.
Adiós por hoy; te hablaré en otra carta de la recepción que me hicieron en esta ciudad.―Tu amiga.
―Enriqueta.
***
Primera Carta de Elena.
Corpus Christe. Enero de 1883.
Inolvidable María:―No encuentro palabras con qué manifestarte el placer que experimento en mi nueva vida; soy tan feliz que temo se emboten mis sentidos y embargue la facultad de expresarme como deseara y merecen las personas á quianes me dirijo; sólo una nube empaña el cielo de mi dicha y es el encontrarme separada de mi familia; pero el destino así lo quiso y estoy resignada, por no decir satisfecha de mi suerte, aunque comprendo y me convenzo de que no hay felicidad completa eu este mundo; sin embargo, exijir más sería hasta cierto punto una inconsecuencia.
La larga distancia que nos separa la salvé en alas de vopor, y aún concervo en mi corazón las gratas impresiones que recibí al subir en el ferrocarril, con el semblante bañado en lágrimas y un intenso dolor en el alma, mezcla de satisfacción y de pena, al ver á mis buenas amigas y compañeras que de mí se despedían también con lágrimas en los ojos. ¡Dejar á personas que de veras me quieren y causarles tan amarga aflicción con mi ausencia!……Esas muestras de afecto serán el más grato recuerdo que conserve del suelo donde ví la luz primera. Y ¿que es la separación? el lazo que une á dos corazones que se aman y se comprenden; no es el olvido como algunos han dado en suponer, por el contrario, nunca se eterniza más el cariño que se profesa á una persona, como cuando se halla ausente.
Mi natural tristeza me acompañó por un buen espacio de tiempo; pero la solicitud de mi esposo por una parte y la variedad del camino por otra, me distrajeron bastante, pues no pude permanecer impacible á los poéticos encantos que se presentan viajando en ferrocarril, ni se sienten las fatigas de una larga travesía. Con aquella asombrosa rapidéz conque se van dejando sembrados, campos y pueblos…..no tan preso se parte de una estación cuando ya se llega á otra; y así, abarcando kilómetros por minutos, llegamos á Laredo, doude pasamos la noche. A la siguiente mañana salimos del hotel donde nos alojamos para continuar nuestra marcha; y caminando de la misma manera que el día anterior, llegamos sin novedad á esta pintoresca población tejana, donde me tienes á tus órdenes en una humilde, pero poetica casita de madera situada cerca del muelle.
―Elena.
(Continuará.)
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Febrero 15 de 1888. Número 10.
Quincenal de literatura, social moral y de variedades
Dedicado a las familias.
Tus ojos
Julia
En tus ojos, ángel mio,
Miro de tu alma el destello
Que ilumina de mi vida
El escabroso sendero.
Iris de paz y ventura
Son de mi nublado cielo;
Estrellas que de mi noche
Adornan el manto negro.
Son sus rayos más hermosos
Que los últimos reflejos
Del Sol cuando ya se oculta
De los mares en el seno.
El brillo de tus pupilas
Envidia causa al lucero
Que aparece por la tarde
Entre nubes de oro y fuego.
Son de mi vida la dicha;
Son mi luz y mi recreo;
Son mensajeros que á mi alma
De la tuya amor trajeron.
Mírame siempre, bien mio,
Siempre mírame con ellos.
Tomo I Monterrey
Febrero 15 de 1888. Número 10.
Quincenal de literatura, social moral y de variedades
Dedicado a las familias.
A Ercilia
María Garza González
Niña, que vas por el mundo
En pos de lauros y flores,
Bañada con los fulgores
Del genio y la inspiración;
Detén tu paso y perdona
Si te ofrezco enternecida
Algo que triago y se anida
Para tí en mi corazón.
*
Sobrado tiempc han vivido
Los pesares en mi alma
Interrumpiendo la calma
De mi pecho y de mi amor;
Y he visto mis iluciones
Al volver de la fortuna,
Ir cayendo una por una
Bajo el peso del dolor.
*
He buscado por do quiera
Afanosa, delirante,
De quietud un solo instante
En mis cuitas sin igual;
Y sólo hallé las memorias
De mis ensueños perdidos
Y el sumbar en mis oidos
Del estruendo mundanal.
Tomo I Monterrey
Febrero 15 de 1888. Número 10.
Quincenal de literatura, social moral y de variedades
Dedicado a las familias.
Confidencia
Ercilia García
“¿Para que negarlo? Soy superticiosa; siempre que oigo el lúgubre graznido de la agorera lechuza, un frío mortal circula por mis venas, porque me recuerda la muerte de mis bellas ilusiones, cuando estaban próximas á realizarse; esa ave funesta fué el emisario de la desdicha que debió hundir mi existencia en amargo duelo, haciendome vagar por el mundo como cuerpo sin alma.”
Esto decía una joven, hermosa como la alborada del naciente día, á otra no menos bella que entristecida la escuchaba.
“Quizá no puedes tu comprenderme querida Anita, prosigió; porque hasta ahora no he tenido valor para confiarte mis penas; porque tu corazón aun no ha palpitado al impulso del amor; pero al menos te explicaré, contandote mi historia, la causa de la profunda tristeza que notas en mí. Como ya sabes, mi venida al mundo costó la vida á la que me dió el ser; dicen que mi padre, pobre y agobiado bajo el peso del dolor por tan infausto suceso, se afanaba por rodear de comodidades á su pobre huérfana, que con tan triste augorio habia venido al mundo. Mi padre tenía una hermana que acababa de perder á su esposo, y vino á hacerle compañía, llorando juntos su infortunio. Dios le había concedido un hijo, único fruto de aquel matrimonio……..Es imposible contarte fielmente mi pasado: cuando hácia él dirijo la mirada, instintivamente se embarga mi alma por la más cruel desesperación.
“Mis primeros años se deslizaron tranquilamente; me sentía felíz halagada con las tiernas caricias de mi padre que, á fuerza de cariño y de cuidados, quería hacerme olvidar la falta de la madre querida, de mi madre que era el tipo perfecto de la mujer cristiana, religiosa, amante y abnegada; pero Dios, ese mis,terio inpenetrable que rije al Universo enterome vedó gozar del cariño maternal; no obstante, yo era feliz, porque en la adolescencia, en esa bendita edad que en todo sonríe, se aspira siempre á tener con quién departir nuestros infantiles juegos; y Gerardo, el hijo de mi tía, me profesaba un cariño acendrado, poco común entre los niños. Llegué á los diez y siete años, á esa edad de las ilusiones, como los poetas dicen, en que el mundo se nos presenta bajo un prisma seductor, y más cuando se lleva en el corazón, el germen de una pasión, porque yo amaba, sí, amaba con la intensidad del primer amor, amaba, como el corazón humano no puede hacerlo más que una vez en la vida, en fin, abrigaba una de esas pasiones basalladoras que deciden de nuestra suerte y que, á no ser porque nuestra alma se alimenta con la filosofía de la religión cristiana, facilmente se descendería hasta el crimen, hasta el suicidio. No puedo decirte si Gerardo me quería igualmente ó nó, porque habia en su carácter un defecto muy marcado que me hacía sufrir horriblemente; había en él mucha volubilidad.
“Un día ¡Dios mio! nunca podré olvidarlo, noté en los negros y expresivos ojos de Gerardo, una expresión extraña, fascinadora; y cojiendome una mano me dijo con insegura voz: “¿Verdad que mis ojos son fieles intérpretes del alma? verdad que comprendes la lucha horrible que mi corazón mantiene? Te amo María y no quisiera amarte” Era la primera vez que me hablaba así y temblando le supliqué se esplicara. “María, no podré hacerte feliz, el fuego y la nieve no pueden juntarse; en tu corazón arde la llama divina del amor, y en el mio sólo hay cenizas; no sé que clase de amor te profeso, tu necesitas quién pueda amarte como tu eres capaz de hacerlo, y yo, nada, frialdad esperando tan solo que del huelo brote una chispa de fuego; esperanza vana.”
“Aterrada oía aquel torrente de palabras, y más cuando me dijo: “Olvida todo lo que te he dicho.”
“Tu debes comprender, querida Anita, lo que debí sufrir, mi alma desfallecía al peso del dolor que la oprimía. ¿Porqué Gerardo tuvo valor para decirme que no me amaba?…….
En negro manto se envolvió el día; todo, ante mi vista, tomaba formas gigantescas, abrasadoras y reveldes lágrimas resbalaban por mis calenturientas mejillas, y en tristisimo insomnio pasé esa noche fatal…….. Los primeros albores de la mañana disiparon el horrible delirio que sufría mi abrumada mente, declarándose una fiebre intensa que me iba consumiendo lentamente; el doctor pronosticó mi muerte, la ciencia médica se declaraba impotente para salvarme…..sólo un milagro de quien todo lo puede me volvería á la vida; el milagro de quien todo lo puede me volvería á la vida; el milagro se verificó………la vida vino, y figurate cual sería la esposa de Gerardo. Entre el gozo y el sufrimiento pasaba los días; él se mostraba amante y tierno unas veces, y otras reservado ó indiferente.
…………..
“Era una noche tranquila y hermosa del inconparable Octubre; la luna triste y melancólica se destacaba en el cielo derramando sus pálidos y poéticos rayos; yo contemplaba extrasiada la magestad y hermosura con que se revisten todos los objetos á la opaca claridad de la reina de la noche; Gerardo me describió los mil encantos, la felicidad sin límites que juntos gozariamos, “Mañana se verán por fin realizados nuestros ensueños, sin que haya, querida María, poder humano que nos separe.” Esto dijo entusiasmado, cuando distinguí en un árbol un bulto negro, se movía, luego lanzando un horrible graznido aleteó sobre nuestras cabezas; era ese animal de que te hablé…..no sé por que me estremecí………jamás había sido supersticiosa pero hubo la coincidencia de la cruel desdicha que mató para siempre mi felicidad…..
“La iglesia estaba convenientemente arreglada, el sacerdote con sus sagradas vestiduras nos recordaba la sublime misión que teníamos que cumplir; Gerardo dió el “sí,” con entusiasmo yo, ahogada la voz por la emoción apenas pude articularlo; de pronto lo ví palidecer y exhalando un ¡ay! desgarrador cayó al suelo sin sentido………¡Dios mio! una mortal aneurisma le arrebataba violentamente la existencia…..
“Tres meses estuve yo entre la vida y la muerte; pero estaba decretado que había de vivir sufriendo. Esto es Anita, la terrible historia de mi vida y ahora, déjame llorar libremente.”
Tomo I Monterrey
Febrero 15 de 1888. Número 10.
Quincenal de literatura, social moral y de variedades
Dedicado a las familias.
Dormido
al niño Gregorio Garza
María Garza González
Duermes tranquilo de tu madre en brazos,
Gozando de su amor bendito y tierno;
Te arrullas con el cántico materno
Sin sentir del pesar los fieros lazos.
*
Feliz entre caricias y entre abrazos
Ignoras que la vida es un infierno
Y que al impulso del dolor eterno
Ay! salta el corazón hecho pedazos.
*
Los céfiros que juegan con tus rizos
Besando con amor tu nieve frente
Aumentan de tus gracias los hechizos;
*
Y tu madre, fijándose sonriente
En tus labios angélicos, rojizos,
En ellos deposita un beso ardiente.
Tomo I Monterrey
Febrero 15 de 1888. Número 10.
Quincenal de literatura, social moral y de variedades
Dedicado a las familias.
Lamentos
Ercilia García
Que triste es ver como pasan rápidas
Las horas de ventura,
Que en su necio egoísmo el mundo mísero
Nos deja disfrutar………
Gozamos ¡ay! con los recuerdos mágicos
De celestial ternura,
Y siempre ardientes y copiosas lágrimas
Nos hacen derramar.
*
Pasa el tiempo dejando en el espíritu
Vacío asolador,
Pues la dicha en el mundo es muy efímera
Si no sombra fugaz…
Iracundo el destino sólo muéstranos
La copa del dolor;
Huyen del alma los ensueños cándidos
Y no vuelven jamás.
*
Pueblan mi mente pensamientos tétricos
Y sufren el corazón…
¡Vuelvan mis sueños de ventura célica
Mi mente á cariciar;
Vuelvan las horas de la calma plácida,
Y vuelo a la ilusión!
Otra vez, otra vez quiero solícita
La dicha disfrutar.
Tomo I Monterrey
Febrero 15 de 1888. Número 10.
Quincenal de literatura, social moral y de variedades
Dedicado a las familias.
El Profesorado en Nuevo León
Maria Garza González
Once años hace que Nuevo León, no contaba con ninguna Profesora recibida, y apenas sustentó su examen la primera el año de 1877, siendo Gobernador y Comandante Militar el Gral. Fuero, pensaron seguir por la misma senda las personas dedicadas al magisterio. Así, al poco tiempo, si no en el propio año, secundó la misma idea, la entonces casi niña Francisca Villareal quien desempeñó el cargo de Directora en el 2° Establecimiento público de niñas, por renuncia de la antigua Directora; luego determinando el aumento de escuelas municipales, fue á establecer el 5° Establecimiento donde permaneció hasta el tiempo que le fue preciso salir de esta capital por convenir así a sus intereses.
Se siguió Amalia García, señorita que tuvo á su cargo el 1er Instituto por espacio de diez años, y ahora continúa impartiendo la instrucción particularmente. María Sánchez, fue la tercera Profesora, haciéndose cargo, á los pocos días de sustentar su examen, del Establecimiento público de Galeana, donde permaneció hasta hace muy pocos días. Le sucedieron las primas hermanas Loreto y Emilia González, que juntas recibieron sus títulos, y luego tuvieron bajo su cargo la dirección del 3er Establecimiento público, hasta que la primera cambió de estado y la segunda se separó para seguir la enseñanza particular. La Srita. Rosa Guerra, que ha consagrado la mayor parte de su vida a la instrucción de la niñez femenina, ya en establecimientos particulares ó fuera de aquí, como en Cadereyta Jiménez y otras partes; en esta ciudad estuvo primero dirigiendo el 3er Establecimiento y después el 4°, hasta que se preparó para atender a un Instituto particular. También Damiana Carmen Samora, se ha consagrado desde los primeros años de su juventud, a la educación de la niñez; fue Directora del 1er. Establecimiento de instrucción primaria para niñas por muchos años, y después del 2° por no poco tiempo, hasta que se retiró a descansar. María Consuelo de Mier, es también del número de las Profesoras recibidas, y sus servicios como tal han sido de alguna importancia
María F. Fernández, fue directora por algún tiempo del 5° Establecimiento, en sustitución de la Sita. Villarreal. Concepción Roel, que tuvo bajo su acertada dirección el Establecimiento n° 4, después de la Srita. Guerra, hasta que fue llamada a desempeñar las tareas del hogar doméstico; su sustituta, Victoriana García Roel, estuvo por algunos años desempeñando el profesorado en Candela, y luego aquí en el 5° hasta el año próximo pasado. Damiana Elizondo y Teresa García, también pertenecen al profesorado. Enedina García, manifestó su aptitud para el magisterio en Gaza García, igualmente que, en Laredo de Tamaulipas, donde permaneció hasta hace muy pocos días.
Rafaela González, se ha ocupado siempre de la instrucción particular, primero en Villa de Santiago, y ahora en esta ciudad. Dolores A. García, quién desempeña actualmente el cargo de Directora en el 3er Instituto; antes lo hizo de una, escuela particular. Petra Moralez, quien después de obtener el título profesional, se hizo cargo de la dirección del Establecimiento público en Cerralvo, y apenas terminó su contrato fue solicitada para dirigir el 2° Instituto en esta ciudad, en sustitución de la Srita. Zamora. Francisca Peña, fue digna Profesora en la H. Matamoros. Dolores Treviño Tijerina, que con acierto dirige ahora el 1er Instituto, antes lo hizo de una escuela particular. La Sra. Manuela Sada de Treviño, recibió su título después de la muerte de su esposo, y el magisterio que ejerce en Cadereita Jiménez, su pueblo natal, es el sostén para ella y sus tiernos vástagos. María Martínez, trabajó como ayudanta en el 3er Instituto; pero apenas sustentó su examen fue llamada a desempeñar las funciones del hogar. Felipa Avalos y Aurelia Gama, son Profesoras a quienes no tengo el honor de conocer. María E. González, esta con el cargo de Directora en Garza García; y Paula Garza en el Pueblo de Guadalupe. Celsa Cantú, tiene un Establecimiento particular, María Garza Ochoa, que fungió como ayudanta en el 5° Instituto, y ahora se halla en el frente del Establecimiento público de Villaldama y, finalmente, la que esto escribe, quién no obstante sus limitados conocimientos, ha ejercido el magisterio á que se ha consagrado con fe y esperanza.
También hijas de Coahuila han venido á recibí sus títulos de Profesoras, en esta, como Luz Neira y Adelaida de Oyos, de Candela; pero sólo la segunda atiende al profesorado, porque la primera vino a desempeñar otro papel en la vida, cual es el de ser el ángel del hogar.
Del vecino Estado de Tamaulipas, tenemos igualmente dos Profesoras, en C. Mier, las dos hermanas Josefa y Guadalupe Canales, quienes se encargan de la dirección de un Establecimiento particular; y con no menos acierto lo hace Antonia Salinas, en Cerralvo; las tres recibieron sus títulos en esta capital en agosto del año anterior.
El número, pues, de Profesoras, en diez años, ascienden á treinta y cuatro.

